SIN GESTIÓN DE RESIDUOS
Más de 3000 millones de personas en todo el mundo viven en países sin gestión de residuos. Es casi la mitad de la población mundial.
Queremos dar un buen uso a todo ese plástico que ya existe en el mundo. Por ello usamos plástico reciclado de Intercambios Comunitarios proveniente de India, donde casi un tercio de los residuos no se gestiona. Cuidamos a las personas y al planeta apoyando a los “recolectores de basura” para que trabajen en condiciones más higiénicas, obtengan un precio justo y sean tratados con el reconocimiento y respeto que merecen.
Más de 3000 millones de personas en todo el mundo viven en países sin gestión de residuos. Es casi la mitad de la población mundial.
Solo en India hay 1,5 millones de recolectores de basura que trabajan en la economía sumergida limpiando las calles y ciudades.
En 2015, los ingresos que obtenían los recolectores de basura por el plástico recogido cayeron en un 60 %*. Este precio ha disminuido aún más.
Los recolectores de basura son vulnerables al acoso y el desarraigo, y no tienen acceso a una asistencia sanitaria digna ni servicios financieros.
*Datos de caída de precio del 60 % proporcionados por Plastics for Change y basados en su investigación.
Plastics for Change es una empresa que, en alianza con las ONG locales Hasiru Dala y Hasiru Dala Innovation (HDI), proporciona a los recolectores de basura de Bangalore unos ingresos estables y mejores oportunidades.
Estas alianzas ayudan a integrar a los trabajadores marginalizados y a los recolectores de basura, conformando una gestión de residuos organizada gracias a su experiencia. La función principal de HDI es mejorar los medios de vida de los recolectores de basura para que puedan aumentar sus capacidades emprendedoras. También proporcionan otra formación útil, por ejemplo, en jardinería urbana.
Annamma ha sido recolectora de basura desde niña. Ahora dirige un centro de recogida de residuos secos.
Con ayuda de Plastics for Change y Hasiru Dala, Annamma recibió formación directiva y ahora emplea a otras personas, incluido su propio marido. La hija de Annamma acude a un curso de ingeniería de plásticos. Annamma desea que su hija continúe con su empresa de gestión de residuos.
Tuvo una infancia difícil, ya que perdió a su padre y vio cómo su madre tuvo que luchar para salir adelante. Al descubrir que podía sacar dinero recogiendo basura, empezó a construir su futuro.
Con ayuda de Plastics for Change y Hasiru Dala, Krishna pasó de ser un humilde recolector de basura a recogerla en 24 puntos diferentes de la ciudad. Ahora dirige un equipo que proporciona servicios de recogida de basura mensuales a hoteles de 3 estrellas. Krishna es ambicioso y espera que el futuro de los recolectores de basura en Bangalore pueda mejorar.