Piel grasa y exceso de sebo
La primera prioridad para una piel con tendencia a las imperfecciones es ayudar a reducir la posibilidad de que los poros se obstruyan. Si tu tipo de piel es graso (que es el tipo de piel que suele ser más propensa a las imperfecciones), probablemente ya conozcas los beneficios de controlar el exceso de grasa. La clave está en la constancia. Algunas operaciones matemáticas sencillas en el cuidado de la piel: dos veces al día, multiplicado por una limpieza doble, un tónico purificante más una hidratante con textura gel es igual a piel con imperfecciones que se siente más aliviada y se ve más limpia. Tu objetivo es ayudar a equilibrar (no eliminar) las grasas naturales de tu piel, y luego restablecer la hidratación adecuada. Una vez hayas dominado esto, ya tienes casi todo resuelto para ayudar a que tu piel se vea más limpia.